El sueño de Finisterra – Epílogo (Fin de la primera temporada)

De las decisiones de hace un tiempo; hoy se plasman por escrito.

Tan raudos como se volvieron de nuevo, así mismo el soñador decide poner un alto a los sueños, un vaso de agua y un alma que no ha de perder le acompañan; no los mató ni el tiempo, ni fueron sepultados por otros, ni se rompen, ni se desvanecen, ni mucho menos se niegan… simplemente se quedan guardados en un rincón, en un papel, dentro de un cajón… pero, la espada no se deja, ni la pluma ni el escudo, pues es menester siempre cargar con ellas, para seguir aun capturando y encajonando visiones.

Así se escribe este Epílogo del mundo sin Prólogo…

“Luego del fuego, luego de los agudos llantos nacidos por el fino corte de las hojas de metal, luego de la media noche entre lunas y estrellas, luego de todo, el muchacho anduvo con algunos de los suyos buscando donde recobrar fuerzas, el oeste era su norte.

Atrás quedan el bosque, la hierba, lo que un día fue bueno – nadie volteará la mirada, lo muerto, muerto está, y el circulo sigue girando – sentenció mientras caminaba aun firme.

Así llegaron hasta el lugar donde las grandes rocas se levantan del suelo; cubiertos por la humedad y oscuridad de las entrañas de aquellas rocas todos descansaron, y el muchacho que los guiaba, casi desnudo y apenas cubierto por sus quemadas ropas, logró alejarse apenas un tercio de legua en sueños.

Abrió los ojos y caminó solo y en silencio ante la atónita mirada de algunos de los suyos…”

Hoy todo continúa igual que ayer, como siempre… y con una exclusiva sonrisa cierro este episodio, como ya dije, solo para encajonarlo. Tal vez un día me reanime a soñarlo, tal vez mañana, o tal vez después de la muerte, pero espero que sea antes de mi ultima muerte, porque siempre llega el momento hasta en que las almas deben morir.

Te volveré a buscar, tal vez, en otro tiempo, aunque no niego que te extrañare, a pesar de que ya te tengo… pero es menester, ahora, ser sólo quien se debe de ser, y un poco mas humanos.

Como dije, hoy todo continúa igual que ayer, como siempre…